El caso de DDT resulta interesante analizarlo por ser muy representativo de los pros y los contras de los insecticidas, especialmente de los más antiguos.

El DDT fue unos de los primeros insecticidas de la segunda generación. Tenía propiedades como veneno para insectos y su baja toxicidad para los humanos. Se calcula que, durante los primeros años de uso del DDT, se evitó la muerte de cinco millones de personas cada año, además de que se protegieron las cosechas y se previno el aniquilamiento de insectos domésticos. Pero, conforme se fueron descubriendo algunos importantes problemas asociados a su uso, empezó a ser cada vez menos usado. El DDT es muy poco soluble en agua, lo que impide que se eliminen en la orina, y es muy soluble en grasas, por lo que se acumula en tejidos de los organismos. De ser benefactor de la humanidad, paso a ser enemigo público entre los años 1970 a 1980, y con ello llego a su prohibición. Aunque, afortunadamente, se desuso coincido con el desarrollo de nuevos insecticidas con características mucho menos peligrosas. 

1.       Discutan en equipo las posibilidades respuestas a las siguientes preguntas:

a. ¿Por qué el caso del DDT es considerado como una historia de beneficios olvidados y de ingratitud social?

Por qué tenía muchos beneficios, pero comenzó hacer mucho daño.

b. ¿Cómo debe afrontar la humanidad la incertidumbre en torno a los efectos de su intervención sobre el medio ambiente?

Tratar de usar productos menos dañinos para el ambiente o para cualquier otra cosa,

c. ¿Cuál sería el criterio para permitir o prohibir el uso de un producto, una técnica o tecnología nueva?

Comprobar que sea efectivo, que lo que se dice en el anuncio o al proporcionarlo sea cierto, y no sea dañino para quien lo consume. 

2.       Busquen tres ejemplos de productos utilizados como técnicas o tecnología que en su momento hayan sido considerados beneficios, pero cuyos efectos nocivos sobre el medio ambiente se hayan comprobado después. 

Livier Aguayo

livier.reina@hotmail.com